The Deliberate Church/The Word and Prayer/es
From Gospel Translations
Introducción
Reuniones de Liderazgo. ¿Las espera usted con ansiedad? ¿Espera usted con ansia para dirigirlas? Algunos de nosotros tienen tales experiencias de confrontación en las reuniones del liderazgo de la iglesia que nos amargan la idea de estar cerca de la acción. Ser rozados por una bala verbal muy a menudo, no estamos siempre seguros de retroceder solo para tomar otro del cesto del pan. Otros han entrado las regiones de liderazgo solo para sentir como si hubieran saltado el charco de la ignorancia. Ambas experiencias nos hacen preguntarnos a veces si existe algo que pueda redimir a la iglesia de las reuniones de liderazgo.
En la última sección tratamos con el proceso de la reunión de los ancianos. Este proceso puede ayudar a eliminar los miembros potencialmente inmaduros quienes hacen desagradables las reuniones de ancianos. En esta sección queremos reflexionar por un momento en lo que los ancianos deben hacer cuando se reúnen, y como lograr hacerlo.
Nuestros ancianos se reúnen una semana sí, y otra no, normalmente los martes por la noche. Usted puede escoger reunirse más o menos frecuentemente. Pero en relación a cuan a menudo se debe reunir, la cosa más importante en establecer entre los ancianos es la unidad alrededor de la Palabra de Dios. Si deseamos la unidad de nuestra iglesia para ser fundamentalmente edificada en la Palabra, entonces la unidad de nuestros ancianos debe estar cimentada en la Palabra.
La Palabra
Leyéndola. Una reunión típica de ancianos en la Iglesia Bautista de Capitol Hill comienza con la lectura de la Biblia. Comenzar con la lectura de la Biblia reorienta a los ancianos de sí mismos hacia Dios y hacia los demás; de sus propias ideas a las ideas de Dios; de su filosofía de mercado que dirigen las empresas a las que trabajan, a los principios de santidad que gobiernan a la iglesia. Llama a los ancianos a renovar juntos sus mentes en al Escritura, forjando la unión entre ellos. También funciona para recordar a los ancianos que así como ellos ejercen una medida de autoridad al tomar decisiones en nombre de la iglesia, ellos también están bajo la autoridad de la Palabra. Los ancianos son llamados a someterse a la Palabra de Dios no menos que el resto de las ovejas del rebaño de Dios. Los recuerda que su autoridad es derivada de la Palabra de Dios, no de ellos. Esta lectura, pues, ayuda a los ancianos a reconocer que la Palabra de Dios merece la primacía en la conversación, las cual se convierte en humildad –una cualidad muy necesaria para ser manifestada cuando se conducen los asuntos espirituales de la iglesia.
Normalmente, los ancianos leerán el pasaje que será predicado el siguiente domingo. Al irlo leyendo, estarán mirando los aspectos del carácter de Dios y la obra por la cual adorarle y darle gracias. Esto es importante. No es una lectura irreflexiva sin sentido, sino una lectura meditativa que busca las razones en el texto para alabar y dar gracias a Dios. Esta manera de leer la Palabra de Dios hace la diferencia, porque comienza a cambiar nuestras actitudes hacia la Palabra, Dios y los demás. En lugar de quejarnos, estamos buscando adorar a Dios y darle las gracias. En lugar de suponer que cualquier cosa que digamos agradará a Dios, venimos a ser enseñados por el texto como alabar a Dios en una manera que le agrade.
Orándola. Una vez que los ancianos han leído el pasaje a ser predicado el siguiente domingo, oran a través de ella. Habiendo tomado del texto alguno de los atributos divinos por los cuales alabar a Dios, o algunas de las gracias que nos ha concedido que nos lleve a ir a El en adoración, cada anciano dirá una o dos oraciones de alabanza. Esta es una parte de cómo los ancianos se vuelven intencionales en dedicarse a la oración y al ministerio de la Palabra (Hech. 6:1-4).
Estudiándola. Periódicamente un tema resurgirá en la congregación que requiera algún estudio bíblico por parte de los ancianos. ¡No desperdicie estas oportunidades! Estas puede ser alguno de los tiempos más enriquecedores y gratificantes en la vida del cuerpo de ancianos.
Ellos pueden también ser de los tiempos más estratégicamente importantes para la vida de la congregación. Cuando las circunstancias en la congregación surjan preguntas bíblicas y teológicas, use estas ocasiones para dar experiencia a los ancianos en buscar las Escrituras juntos. Provéales con otras herramientas de estudio, tales como comentarios y buenos libros teológicos sobre un tópico en particular. Animar a los ancianos en esta dirección o solo les mostrará argumentos en sus conocimiento bíblico sino también les mostrará lo se que parece pastorear el rebaño del pueblo de Dios en una manera bíblicamente responsable y teológicamente consciente. Será también beneficioso para la congregación, especialmente cuando los ancianos hagan de conocimiento al cuerpo de los frutos de su estudio en forma de documento de resumen que presente la posición bíblica que han tomado los ancianos respecto a ese asunto.
Esta clase de estudio es una parte importante del liderazgo espiritual corporativo de los ancianos del rebaño. Esta es una parte de cómo los pastores de la iglesia guían al rebaño a pastos verdes de teología aplicada. Con demasiada frecuencia nos quejamos de que nuestras congregaciones no están interesadas en la teología. Pero ¿Por qué deberían estarlo si no son guiados por los ancianos? El estudio de los ancianos y la presentación de sus conclusiones bíblicas pueden ayudar a desarrollar el apetito teológico de la congregación al ir viendo a sus líderes tomando seriamente la teología y aplicándola fielmente a la vida corporativa de la iglesia. Como resultado, el estudio estratégico de la Biblia conducido entre los ancianos en temas concernientes a la vida de su iglesia local puede tener un efecto de desarrollo de la madurez teológica y el discernimiento de los miembros. A esto es a donde queremos guiar al rebaño de Dios –a los pastos de la Su Palabra.
GABINETE DE ESTRATEGIA
- Lea 2 Reyes 22:8-23:14. ¿Qué precedió a las reformas instituidas por el Rey Josías? ¿Por qué era importante que Josías mantuviera esto en mente al ir a su trabajo como Rey? ¿Cuál fue el resultado final de la antigua desobediencia de Judá a la Palabra de Dios (vea 23:26-27)?
- Lea Nehemías 8:13-18. ¿Qué incitó la obediencia renovada a la Ley de Dios entre los líderes? ¿Por qué habían estado en desobediencia por mucho tiempo?
- ¿Cómo conduce las reuniones de sus líderes/ancianos? ¿Por qué lo hace de esa manera?
- ¿Cómo puede la lectura y la oración de la Escritura cambiar el tono de sus reuniones? ¿Cómo podría trabajar para cambiar la madurez y la atmósfera espiritual de su iglesia?
La Oración
Uno por el otro. Después de que la Palabra a sido leída y orada, los ancianos compartirán cada uno que esta sucediendo e sus vidas –preocupaciones en el trabajo o en la casa, sus luchas espirituales, relaciones personales, oraciones contestadas, etcétera. Es tiempo de compartir provee una medida de rendición de cuentas y de mutuo estímulo que es crucial para la integridad y la longevidad de cualquier ministerio del anciano. Funciona como una oportunidad normal para los ancianos de expresar cuidado el uno por el otro, para monitorear la salud espiritual del otro, y para reafirmar la confianza relacional entre cada uno. La fidelidad puede tomar un largo camino en combatir el aislamiento pastoral y cultivar relaciones espirituales significativas caracterizadas por un amor y humildad mutuos. Una vez que cada uno tenga la oportunidad de compartir, cada anciano orará por el otro. Esto puede ser visto como un paso obvio para algunos, pero muchos cuerpos de ancianos descuidan la oración y tratan sus reuniones como reuniones corporativas de ejecutivos que reuniones de pastores subalternos de Dios.
Por cada uno de los miembros en individual. Uno de los tiempos más estratégicos para los ancianos de orar por los demás miembros es durante las reuniones de ancianos. Pero usted puede tener el hábito de tener ancianos que tomen turnos para hacer una o dos oraciones por algunas personas en cada página del directorio de la iglesia, o quizás orar más a fondo por una sección, aun cuando usted no conozca a cada persona de la misma manera, esta práctica lo estimulará a conocerlos personalmente para que usted pueda orar por ellos más específicamente, y le dará práctica a los ancianos de hacer oraciones bíblicas por los demás. Orar juntos por las ovejas como grupo de reunión de pastores subalternos es una excelente manera de promover la salud espiritual de la congregación, para mantenerse el uno al otro como ancianos responsables para la fidelidad a la oración por la congregación, y para guiar con el ejemplo.
Por el cuerpo corporativo. Es tentador pensar que solo debemos orar para que Dios haga nuestras iglesias grandes. Pero lo que en realidad buscamos es salud, no solo tamaño. Las iglesias pueden ser increíblemente poco saludables incluso cuando son grandes. Eso esta bien. Una iglesia grande no siempre será una mejor iglesia. Puede hacernos ver mejor como líderes, pero el tamaño no siempre indica salud (¡como muchos de nuestros cuerpos atestiguan!). Tiene sentido detenerse y preguntarse: ¿Cuáles son sus motivos para orar como lo hace por su iglesia? ¿Cuándo nos reunimos como grupo de ancianos, necesitamos estar orando no solo para que Dios haga grande nuestras iglesia, sino para que las haga sanas. Memorizar las oraciones de Pablo por las iglesias sería un gran comienzo para un grupo de ancianos. Estimule a sus ancianos en las siguientes semanas a memorizar Efesios 1:15-23; 3:16-19; Filipenses 1:9-11; Colosenses 1:9-14; 1 Tesalonicenses 3:11-13; y 2 Tesalonicenses 1:11-12. Guíe con el ejemplo, y ore para que estas cualidades y hábitos sean incrementen y sean característicos en la vida corporativa y el testimonio de su iglesia.
GABIENTE DE ESTRATEGIA
- Lea Efesios 3:16-19. ¿Qué es lo que esta sea una buena oración para hacer por la iglesia local?
- Lea Colosenses 1:9-14. Trate de memorizar este pasaje recitándolo y orándolo una vez por día durante tres emanas. Memorice otro pasaje de oración cada semana durante un mes. Refuércelo en su mente y corazón orándola diariamente y repetidamente por otros líderes y miembros de su iglesia.
Conclusión
Hay una variedad de maneras para hacer una iglesia grande realmente rápido. Pero Dios ha prometido prosperar y crecer a Su Iglesia por Su Palabra y por Su Espíritu. Haciendo un compromiso firme por leer la Biblia y orar en las reuniones de ancianos, luego, ponernos en la corriente de las fuentes de poder que Dios ha prometido inequívocamente bendecir. Al llevar cabo este compromiso a la Palabra y la oración entre los ancianos reunidos, les estaremos animando a confiar no en programas o en personalidades, no en promociones o comodidades físicas, sino en la poderosa Palabra de Dios y en la promesa de la vida dada por Su Espíritu.